Fallos en impresión 3D: cómo identificarlos y corregirlos sin desperdiciar material
La impresión 3D no perdona los errores. Una mala configuración, una cama desajustada o un filamento en mal estado pueden convertir una pieza prometedora en un amasijo de plástico. A todos nos ha pasado, y la buena noticia es que la mayoría de los fallos tienen solución si sabes qué estás viendo. En este artículo aprenderás a detectar los fallos más comunes en impresión 3D, cómo corregirlos y qué hacer para no volver a perder tiempo ni material en el futuro.
Por qué se producen los fallos en impresión 3D
Los fallos no suelen deberse a una única causa, sino a una combinación de factores: temperatura, calibración, calidad del filamento, velocidad de impresión o incluso la humedad ambiental. Saber identificar el origen del problema es esencial para resolverlo de raíz.
Los errores más frecuentes se agrupan en tres categorías:
- Mecánicos: problemas físicos de la impresora.
- Térmicos: temperatura incorrecta en la boquilla o cama.
- De configuración: parámetros mal ajustados en el slicer.
Fallos en la primera capa: el comienzo de todo
La primera capa es la base sobre la que se construye toda la pieza. Si no se adhiere bien, todo lo que venga después estará condenado.
Síntomas más comunes:
- La pieza se despega durante la impresión.
- El filamento no se adhiere a la cama.
- Capas desiguales o rugosas.
Causas probables:
- Cama desnivelada.
- Temperatura de cama baja.
- Distancia boquilla-cama incorrecta.
Cómo solucionarlo:
- Nivela la cama con una hoja de papel (debe rozar suavemente).
- Ajusta la temperatura de cama entre 55 y 65 °C para PLA.
- Usa "brim" o "raft" para aumentar la superficie de contacto.
- Imprime la primera capa a velocidad reducida (20 mm/s).
Fallos por falta o exceso de material
Una mala calibración del flujo puede arruinar la textura o resistencia de tus piezas.
🔽 Subextrusión (falta de material)
- Capas finas y frágiles.
- Pequeños huecos visibles entre líneas.
- Piezas quebradizas.
Solución:
- Verifica el diámetro del filamento (1.75 mm o 2.85 mm).
- Sube el flujo un 3–5%.
- Aumenta ligeramente la temperatura del extrusor (+5 °C).
- Limpia la boquilla para eliminar residuos.
🔼 Sobreextrusión (exceso de material)
- Líneas abultadas o superficie irregular.
- Bordes deformados.
- Medidas fuera de tolerancia.
Solución:
- Reduce el flujo un 3–5%.
- Revisa el "E-step" del extrusor y calibra correctamente.
- Comprueba que el filamento no esté hinchado o húmedo.
Capas desplazadas o fuera de alineación
Este fallo se da cuando los ejes pierden pasos o se mueven de forma irregular durante la impresión.
Causas más frecuentes:
- Correas flojas o mal tensadas.
- Rodamientos desgastados.
- Drivers de motor sobrecalentados.
- Golpes o vibraciones externas durante la impresión.
Cómo corregirlo:
- Ajusta las correas con una ligera tensión.
- Limpia las guías y aplica lubricante.
- Asegúrate de que la impresora está sobre una superficie estable.
- Coloca ventiladores adicionales si los motores se calientan demasiado.
Fallos por temperatura incorrecta
El control térmico es clave para un acabado profesional. Si el filamento no funde bien o lo hace en exceso, aparecerán errores como hilos, grietas o capas mal unidas.
Síntoma | Causa | Solución |
---|---|---|
Capas que no se pegan | Temperatura baja | Sube la boquilla 5 °C |
Hilos entre zonas | Temperatura alta | Baja 5–10 °C |
Burbujas o brillo irregular | Filamento húmedo | Seca el filamento 4 h a 45 °C |
Deformación en esquinas | Ventilación insuficiente | Aumenta el flujo de aire del ventilador |
🔥 Temperatura recomendada para PLA: entre 195 °C y 210 °C, dependiendo del fabricante y la velocidad.
Errores en el relleno (infill)
Cuando el relleno no se imprime correctamente, la pieza puede quedar débil o con huecos internos visibles desde el exterior.
Problemas habituales:
- Falta de relleno en zonas intermedias.
- Líneas que no se cruzan correctamente.
- Sonido hueco al golpear la pieza.
Solución:
- Aumenta el porcentaje de relleno (mínimo 20%).
- Comprueba que la boquilla no esté obstruida.
- Reduce la velocidad del infill un 20%.
- Añade más capas superiores (mínimo 4).
Problemas de retracción y stringing
El famoso "stringing" (hilos finos entre partes de la pieza) es una de las señales más claras de mala retracción.
Cómo evitarlo:
- Aumenta la distancia de retracción de 0.5 mm en 0.5 mm hasta encontrar el punto ideal.
- Sube la velocidad de retracción a 40 mm/s.
- Reduce la temperatura 5 °C si persiste.
- Activa "Combing Mode" o "Evitar cruces de perímetro" en el slicer.
Fallos en la superficie de la pieza
Si notas que las paredes laterales presentan vibraciones o irregularidades, probablemente sea un problema de velocidad o de rigidez estructural.
Causas comunes:
- Velocidad de impresión excesiva.
- Ejes con juego.
- Vibraciones externas.
Solución:
- Reduce la velocidad general a 50 mm/s.
- Asegura la impresora con topes antivibración.
- Añade refuerzos o travesaños si la estructura es ligera.
Errores de software o configuración
A veces el problema está en el slicer o en los parámetros del archivo G-code.
Errores típicos:
- Altura de capa inadecuada.
- Temperaturas predeterminadas erróneas.
- Diámetro del filamento incorrecto.
- Activación de modos experimentales sin conocimiento.
Solución:
- Usa perfiles base del fabricante.
- Revisa todos los valores antes de imprimir.
- Asegúrate de que el slicer esté actualizado.
Cómo reducir el desperdicio de material
Para ir terminando
Los fallos de impresión 3D son parte natural del aprendizaje, pero entender su causa te ahorrará horas de frustración y metros de filamento.
Con paciencia, buena observación y algunos ajustes finos, podrás identificar cualquier error y corregirlo antes de que arruine tu pieza.
Recuerda: cada fallo es una oportunidad para conocer mejor tu impresora. Si tomas nota de tus configuraciones, limpias y calibras con frecuencia, tus resultados serán cada vez más consistentes y profesionales.